las horas transcurren
lentamente
se suceden infinitamente
invisibles, como el aire
como el viento
y se esconden en las flores
en un árbol
un cuaderno
una lágrima de amor
un abrazo de consuelo
en un beso de enamorados,
la corriente de un riachuelo;
en la risa de un niño contento
o en recuerdos olvidados