yo ya no soy yo. soy sólo una reminiscencia de lo que fui. un espectro, una imagen fugaz.
no soy yo y no sé quién soy. soy una impostora, una mala copia de mí misma. un recuerdo adulterado.
no puedo imaginar quién seré de ahora en adelante, porque hasta ahora las perspectivas son desastrosas. y no quiero ser quien fui, ni ser quien soy ahora: la nada misma, un signo de interrogación que flota en el éter y se mueve en el tiempo y el espacio.

melancolía dominical

en una terraza tomando sol
leyendo novelas
historias de viajes
vidas salvajes
luego al televisor
al computador
navegando, husmeando
vidas ajenas
cosas inservibles
hechos inverosímiles
todo aquello que no soy
y que quisiera ser
la tristeza pronto empieza a ceder
en un domingo que acaece